Como odio amarte.

Odio tu forma de mirarme. Tu forma tan falsa de mentirme. Odio como dices que me quieres, pero más lo que más odio de ti es tu forma de hablar, tu acento gaditano y tu voz ronca. Tu forma de sonreir. La forma en la que me abrazas cuando más te necesito. Odio no poder tenerte en todo momento. Tambien odio todos tus regalos, los que cuando veo me recuerdan a ti. Odio todas nuestras canciones. Odio sentir esta puta mierda. Odio sentir que te necesito cada segundo. Odio sonreir cuando te veo. Odio esas mariposas que no paran cuando te veo. Pero lo que más odio es cuando me dices que me quieres, que ella no es nadie. Odio cuando me dices que tenemos que hablar y me preocupo por la situación y lo único que tienes que decirme es que me echas de menos. Odio como te burlas de mi cuando dices que no me lo tome en serio. Cuando dices que me pico demasiado. Cuando me dices que me amas y que soy única. Odio que llegues tarde a todos sitios. Odio que digas que soy perfecta. Odio que mi corazón palpite a mil por hora cuando oigo. Lo odio. Odio tu forma de ser. Odio como eres, lo que te gusta y cuando lo haces. Odio que me compares y más, que me hagas sentir una princesa. Joder. Lo que más odio son los 300 kilómetros que nos separan. Odio el no poder decirte en 5 minutos te espero en el portal. Odio que estés lejos. Y más no saber lo que pasa. Odio enfadarme contigo. Odio verte y no poder hablarte. Pero odio esa sonrisa inaguantable. Y lo peor, es que odio no poder odiarte, porque no te odio ni un poquito. Ni tu sonrisa, ni tu forma de ser, ni tus canciones, ni tu forma de cojerme la mano. Lo único que odio es haberme enamorado de ti.